Mi esposa y yo siempre hemos tenido una vida sexual muy activa y explosiva, pero últimamente había notado que se había aburrido y necesitaba algo nuevo para excitarla.
Un día, decidí sorprenderla. Le pedí que se pusiera su mejor ropa interior y que se tumbara en la cama. Luego, comencé a masturbarme sobre ella, untando todo su culo con mi semen caliente y pegajoso.
Ella se quedó sorprendida, pero pronto comenzó a gemir de placer mientras se tocaba y se frotaba sobre el semen que le había dejado en su culo. Luego, me pidió que me tumbara en su lugar y se sentó sobre mi polla, cabalgándome hasta que ambos llegamos al orgasmo.
Desde entonces, hemos repetido esta práctica varias veces y siempre nos ha excitado aún más. Mi esposa ha disfrutado del semen en su culo y yo he disfrutado de verla disfrutar.
novios
✅️ Con mi coño mojado follando con mi amigo para que se sienta alegre todo el día
Esa mañana me desperté y supe que tendría un día difícil en el trabajo. Necesitaba algo para levantarme el ánimo, así que decidí hacer una visita a mi amigo.
Llegué a su casa y lo encontré en su habitación, parecía un poco triste. Sin decir una palabra, me arrodillé frente a él y comencé a desabrocharle los pantalones, hasta que saqué su polla dura.
Comencé a chupársela, mientras me miraba con sorpresa. Luego, me subí a su regazo y comencé a cabalgar sobre su polla, gimiendo de placer mientras la sentía dentro de mí.
El soundo de mis gemidos lo animaron a seguir adelante y pronto estaba moviéndose debajo de mí, follándome con fuerza. Pude sentir cómo se endurecía aún más dentro de mí, y supe que estaba a punto de correrse.
Finalmente, se corrió dentro de mí, y yo grité de placer mientras me venía también. Me quedé allí un momento